Así hemos querido presentar a esta marca de pan rallado en su próxima feria en Casablanca, Marruecos. Seguro que tú eres de los que piensan que el pan rallado no tiene ningún misterio, coges el pan que te sobra, lo dejas secar y lo rallas ¿no?
Pues no.
En el caso de Illargui, el pan se elabora exclusivamente para ser rallado después. El proceso es flipante, alucinaríais. No hay nada al azar. El grosor del grano, más grande o más pequeño, se estudia al milímetro. También su composición: hay vida más allá del clásico pan con perejil y ajo. Un proceso complejo detrás de un producto aparentemente sencillo, que hemos querido reflejar de forma clara y atractiva. Ahora solo esperamos que se cumpla el famoso dicho: grano a grano se conquista el desierto ;-)